sábado, 1 de febrero de 2014

Querida distancia.

La distancia sólo son números.
Tener a la persona que más quieres lejos de ti mientras sólo desearías tenerla a centímetros.
Saber que no puedes verle cada vez que quieres, que tienes que esperar a que llegue el día que vuelva.
Cuentas los días esperando a poder recibirlo con un gran abrazo que valga todos lo días sin verle.
Debería estar prohibido estar tantos días sin verle.
Tu rutina del día a día es echarle de menos, te despiertas pensando en él y durante todo el día solo sabes preguntarte ¿qué estará haciendo? ¿dónde estará?...
Sentir deseos de abrazar a alguien que tienes lejos. Y todo sería perfecto teniéndolo ahí, contigo siempre.
Hablar con el y solo tener ganas de traspasar la pantalla.
Sabes que lo necesitas contigo siempre para poder ser feliz, necesitas sus tonterías, sus brazos y sus besos, lo necesitas todo de él.
Tienes miedo, en que se canse de estar así, que conozca a otra persona
y le guste más que tu.
Y cuando vuelve y estás un tiempo con él, sabes que se hace la hora de despedirse y se te hace tan difícil tener que volver a despedirte.
Eres la persona perfecta en la distancia equivocada.
"La distancia sólo aumenta el deseo de reencontrarse."

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